Un arquitecto de cabecera es un profesional encargado de mantener a punto los edificios, aumentando su valor y, en definitiva, mejorar la calidad de vida de todos las personas. Su función sería la de ayudar a conseguir un buen estado de conservación del inmueble, detectando patologías o deficiencias en estado inicial como resultado de inspecciones más periódicas.
Nuestra experiencia estos últimos años nos ha hecho ver que muchas veces no conocemos lo suficiente el estado en el que se encuentra el parque edificado que utilizamos. ¿Sabes cuánta energía consume tu vivienda? ¿Y tú oficina? ¿Y cómo se pueden hacer más eficientes estos espacios? ¿Conoces el estado real de conservación de tu edificio? ¿Dónde falla? ¿Cómo cuidarlo? ¿Qué necesitaría para poder ofrecer el mismo estándar de calidad que uno nuevo? ¿Es realmente accesible el camino que sigues cada día para llegar hasta la puerta de tu casa? ¿Cualquier persona, independientemente de sus capacidades, puede moverse libremente por el edificio que usa habitualmente?
Funciones del arquitecto de cabecera
El arquitecto de cabecera se preocupa por la conservación y el mantenimiento del edificio, alargando la vida del edificio y velando por la calidad de vida de sus ocupantes. Es como el médico de cabecera, salvo por que en su caso vela por la salud del edificio.
Ventajas del arquitecto de cabecera
Algunas ventajas de tener un arquitecto de cabecera son:
- Ahorra derramas innecesarias a la comunidad, ya que al ocuparse de forma continuada de la conservación puede anticiparse a los problemas.
- Hace que la revisión de la ITE sea más sencilla porque conoce el edificio, dispone de los documentos técnicos y se encarga de gestionar todo el proceso.
- Mantiene el valor de tu casa a través de los años. Aportando seguridad y evitando riesgos.
- Coordina y supervisa el trabajo de los diferentes profesionales para que se hagan correctamente.
- Diseña un plan de conservación con soluciones específicas para tu edificio, lo que se traduce en un ahorro importante de dinero.
- Mejora la calidad de vida de tu comunidad porque su visión global, experta y a largo plazo puede convertir la conservación en oportunidades para mejorar espacios e instalaciones y adaptarse a las necesidades de los vecinos.
Fases de nuestro servicio
- ANÁLISIS: Conocer cómo es el espacio a tratar. Para ello, contamos con equipos especializados para realizar mediciones y controles de todos los elementos que lo puedan componer (como cámaras termográficas, higrómetros, anemómetros, fisurómetros…). Además, colaboramos habitualmente con profesionales de distintos ámbitos para poder conocer mejor cómo funciona en todos sus aspectos.
- DIAGNÓSTICO: Con los datos que obtenemos de la primera fase, elaboramos el diagnóstico de cómo se encuentra el espacio o edificio, focalizado en lo que cada propietaria quiera saber. Esto se traduce en documentos de distintos tipos, como ITEs (Informe de Inspección técnica de edificios), LEE (Libro del Edificio Existente), LUM (Libros de Uso y Mantenimiento), Informes de patologías, Auditorías Energéticas, CEE (Certificados de Eficiencia Energética) o Informes de Accesibilidad.
- INTERVENCIÓN: Propuesta de actuación que permite mejorar, solucionar o controlar lo que se ha recogido en el diagnóstico. Normalmente, en esta fase es en la que se proponen y realizan los proyectos de rehabilitación, restauración y/o accesibilidad.
- MANTENIMIENTO: Con las fases anteriores terminadas, y cuando el tipo de espacio estudiado lo requiere, se realizan modelos digitales de edificios en base a la tecnología BIM y OpenBim, que permiten conocer todos los entresijos del mismo. Además, ofrecemos un servicio de Revisiones Anuales de Control, que permitan comprobar el estado de conservación del edificio, hacer un seguimiento de las incidencias que se produzcan y aclarar cuantas consultas técnicas puedan surgir relacionadas con su uso.
Gestión de subvenciones
Como complemento a este trabajo, estos años nos hemos especializado en la gestión de subvenciones. En muchos casos, algunas de las intervenciones necesarias en los edificios no son asumibles por las propietarias por dispararse el coste de las mismas. Con las subidas de precios que estamos viviendo, cada vez es más frecuente que esta pata se convierta en parte fundamental para el desarrollo de proyectos.
Nuestra experiencia positiva con distintos programas (como PAREER, PIREP, RENOVE Vivienda, PREE, Líneas 1, 2 y 3, Next Generation…) y administraciones (IDAE, Gobierno Vasco, EVE, Ayuntamientos…) nos permite alcanzar tasas muy altas de resolución en este aspecto, habiendo llegado a conseguir subvenciones a fondo perdido superiores al 70% del coste de las actuaciones a realizar. Tenemos un éxito del 100% en la gestión de ayudas, obteniendo hasta la fecha más de 1.700.000€ a fondo perdido en el total de expedientes tramitados en proyectos de distinta envergadura.